Anny Peterson

 Santa, este año ¡voy a ser mala!

Colección Mil Amores

Publicado en Diciembre de 2024

Kindle Edición

339 páginas

Romance Actual Navideño

Siempre he estado en la lista de chicas buenas de Santa Claus.

¿Cómo no iba a estarlo? Soy la que siempre se sacrifica por los demás, ayudándoles con cualquier problema a cualquier hora. Soy la que... cuando descubrió a su novio enrollándose con mi hermana en Nochebuena, me tragué el dolor, les dije que lo entendía y les di mi bendición. Porque eso es lo que hace una buena chica, dejar que otros sean felices, aunque sea a costa de su felicidad...

También soy la que aceptó ayudarles a organizar su boda navideña al año siguiente, a pesar de que esa siempre había sido mi boda soñada con él, pero cuando, solo quedaban diez días, descubrí algo que fundió todas mis buenas intenciones con ellos.

Se acabó la chica buena... esto es la guerra. Van a probar su propia medicina.

Voy a dinamitar esa boda. ¿A mi hermana le gusta robarme novios? Pues voy a traer uno a casa esta Navidad al que no va a poder resistirse. Andrew Norton es el tío más capullo de mi oficina. Y también el más guapo, el más tatuado y el más musculoso. Un bad boy de manual. Mi antihombre.

Con lo que no contaba es con que me volviera loca a mí...

Moraleja: ser una chica mala, puede volverse en tu contra. Puede hacerte sudar, jadear y desear cosas que nunca antes habías querido.

En cuanto vi en novedades este libro tenía muy claro que lo iba a leer, así que cuando salió como la Lc Navideña que hago con mis antiguas compis del Foro Romance Oscuro, supe que lo iba a disfrutar mucho más si cabe.

Nataly Evans es una chica bastante pasiva. Su familia se aprovecha de ella, su hermana le ha quitado el novio, encima la está preparando la boda, y para rematarlo todo, hasta la han quitado el anillo que su abuela dejó para ella... y encima solo la ha apoyado una de sus numerosos primos. Por esta razón está decidida a ser mala y boicotear la boda.

Andrew se ha posicionado como director en la empresa donde trabaja, y compite con su compañera Nataly. Cuando esta le chantajea con contar quien es su madre, pero también le dice que se apartará del postulado a dirección, no duda en ayudarla. Tiene que hacerse pasar por su novio y seducir a su hermana.

Pero cuando llegan a la mansión de los Evans, Andrew no se comportará como el novio que Nataly quería, pero con su forma particular de ser irá haciéndose un lugar en su corazón.

Primer libro que leo de Anny Peterson, pero no va a ser el último porque me ha gustado mucho su forma de escribir, y además me ha hecho reír que es algo que no consigue cualquiera.

Como buena novela navideña que se precie, tenemos una trama que gira durante estos días, con mucho romance pero también humor.

Nataly es un personaje que evoluciona mucho durante la lectura. Al principio me caía fatal porque es una mujer pasiva total, y yo odio este tipo de personajes. Pero gracias al prota le va echando narices a la vida y al final me ha gustado muchísimo.

Andrew es un malote lleno de tatuajes, con piercing y pendientes, además de anillos enormes. Es un rompecorazones y no sabía que esperar de él, pero todo lo que tiene de malote lo tiene de buena persona y me ha encantado. 

La trama comienza en vísperas del día de Navidad, con una Nataly sobrepasada por los actos de su hermana y a la que su familia no apoya en ningún momento. Cuando chantajea a Andrew, su compañero buenorro de trabajo, y le propone un trato para que la ayude fue el momento en que me quedé enganchada totalmente a la lectura.

He odiado a la familia Evans, no comprendo que unos padres, tíos y primos dejen en la estacada a una de sus hijas para apoyar a la otra hija que se dedica a destrozar la vida de la primera. Tampoco me ha gustado que Nataly sea tan pasiva, si se ha convertido en la esclava de todos ellos. Por eso me ha encantado Andrew, en el momento que llega a esa familia empieza a marcar puntos y gracias a los más divino, nuestra prota le sigue el rollo.

La historia de amor se cuece a fuego lento y me ha encantado. Ambos tienen su plan para boicotear la boda, y gracias a la convivencia comienzan a conocerse mucho mejor y sus sentimientos cambiarán. He disfrutado de ver como se complementan y como él logra que nuestra prota florezca.

A todo esto le tenemos que sumar la boda de Madison, la hermana horrible, y del exnovio de Nataly. Me he reído un montón con las cosas que pasan, he disfrutado de los cortes que les pegan... pero me ha faltado que nuestra prota le diga a la cara a su ex un montón de verdades.

La novela va dando pequeños giros que harán que nuestros protas se planteen sus vidas personales, o su futuro. Me ha gustado conocer a la familia de Andrew, tampoco es perfecta y también tienen sus propios dramas.

En los últimos capítulos pasa de todo, habían cosas que se veían venir pero reconozco que yo esperaba alguna que otra conversación, y un final más apoteósico. Por falta de uno, tenemos tres epílogos, que me han gustado mucho y que me han sorprendido, pero sobre todo son totalmente románticos y navideños.

En conclusión, Santa, este años ¡voy a ser mala! ha sido una lectura divertida que me ha tenido enganchada todo el tiempo y que se lee en un plis plas, que ha conseguido que me echase a reír en más de una ocasión, y que terminase la lectura con una gran sonrisa. Creo que este año he comenzado con buen pie con los libros navideños, así que no tardaré en traeros otra reseña de este tipo.