Susanna Herrero

 No es amor, es diciembre

Autopublicado Octubre 2018

Ebook

351 páginas

Romance Actual

Adam Wallace es abogado. No le gustan los químicos.

Ariadna Cabana es química. No le gustan los abogados.

Ella tiene cuatro hermanos y unos padres con los que mantiene una gran relación.

Él… sobrevive, pero arrastra los fantasmas de aquello que sucedió tantos años atrás.

Adam y Ariadna se encuentran.

Ella no ve que él tiene el pelo ondulado y alborotado, unos ojos marrones muy expresivos y una bonita sonrisa; solo ve una diana para su desahogo.

Él no entiende una palabra de lo que ella dice; solo ve a una española rubia con demasiado carácter.

Él ama la música sobre casi todas las cosas.

Ella considera que la música no es más que ruido.

¿Solución?

Cinco citas con un único posible desenlace: que ella aprenda a amar la música y acostarse juntos una única vez.

¿Qué puede salir mal?

Todo.

Susanna Herrero es una de mis autoras favoritas y me animé a leer este libro porque llevo un año de lecturas bastantes mediocres y necesitaba un respiro... y sabía que leyendo una de sus novelas conseguiría animarme

Ariadna intenta recuperar el cd de una de sus compañeras de trabajo del coche del exnovio de esta. Y mientras lleva la hazaña la amiga se corta y les toca ir al hospital. Es allí donde conocerá a un tipo de lo mas desagradable que opina que las españolas son todas morenas.

Cual no será su sorpresa cuando se lo vuelva a encontrar en el bufete de abogados que va a llevar la denuncia que el exnovio de su amiga las ha puesto.

A Adam no le cae muy bien Ariadna la primera vez que la ve, pero cuando vuelven a encontrarse decide que no estaría mal enrollarse con ella, solo en plan rollete. Por eso traza un plan, tendrá varias citas con ella y después de conseguir lo que quiere, la dejara y volverá a su vida.

Pero las cosas no salen como él quiere, y Ariadna va haciéndose un hueco en su mente y tal vez, en su corazón.

Como siempre me pasa con Susanna, es empezar la lectura y quedar totalmente enganchada al libro. Este gira en torno a Adam, uno de los personajes principales de la saga Los saltos de Sara, pero se puede leer de manera independiente.

Adam perdió a sus padres cuando era un niño, solo gracias a sus grandes amigos Sara y Oliver consiguió salir del pozo donde se metió. Por esta razón no quiere enamorarse, no quiere tener hijos, no quiere volver a sufrir. Adam me ha gustado mucho, y comprendo que tenga miedo pero no se si se ha dado cuenta que también puede perder a sus amigos a los que le une un lazo inquebrantable. 

Ariadna es una joven española que esta trabajando de química en Edimburgo. Me ha encantado su forma de ser, totalmente Cabana como su familia. Me ha parecido divertida, comprensiva y he empatizado todo el tiempo con ella.

La trama va girando alrededor de ellos dos. Me ha resultado muy divertido como se conocen, y he disfrutado mucho de las citas tan peculiares que va preparando Adam, que me han parecido muy divertidas y bastante ocurrentes. Se ve como se van enamorando, incluso Adam que no quiere saber nada del amor. 

He disfrutado mucho de los WhatsApp de la familia Cabana, con los que me he reído un montón, por no hablar del cameíto con sus primos (mis adorados Cabana de los que tenemos saga). No me ha convencido todo el tema del final, cuando ella da una noticia inesperada la reacción de él me ha dejado un tanto descolocada, sobre todo porque solo le pueda ayudar su amiga Sara.

La ambientación en Edimburgo me ha gustado, pero me hubiese gustado que parte de la acción transcurriera en calles conocidas, o algún parque... porque por suerte yo he estado visitando esta ciudad y me apetecía poder decir "ala, ahí he estado yo". Porque hay una parte que visitan España, y yo el verano pasado estuve en Calpe, en la peña donde transcurre el reencuentro con los primos, y disfruto tanto de saber que yo he estado ahí... no se explicarme, pero disfruto el doble de la lectura.

La parte final es muy bonita y romántica, pero no me ha convencido del todo. Se que Adriana es un pedazo de pan, pero yo no lo hubiese perdonado tan fácilmente. Y respecto al epilogo, sigo comprendiendo que el tándem Sara-Oliver-Adam sea inseparable, pero yo esperaba que se hubieran abierto un poquito.

En conclusión, No es amor, es diciembre ha sido una lectura que me engancho de principio y final, disfrutando totalmente de la historia de Adam y Ariadna, y aunque ha habido alguna cosilla que no me ha convencido, ha sido un libro que me ha encantado y que reafirma mi opinión respecto a que Susanna Herrero es una de mis escritoras españolas favoritas.